Considera estas cinco preguntas antes de hablar cuando estás enojado:
P: ¿Es preciso? ¿Es correcto o exacto lo que quiero decir?
I: ¿Es Inspirador? ¿Fortalece o te hace llorar?
E: ¿Es Edificador? ¿Estarás edificando a alguien al decirlo?
N: ¿Es necesario? Si no es necesario, ¿Por qué lo tengo que decir?
S: ¿Es Sabio? ¿Le has pedido a Dios sabiduría para decirlo?
A: ¿Es amable? ¿Animará o desanimará?
I: ¿Es Inspirador? ¿Fortalece o te hace llorar?
E: ¿Es Edificador? ¿Estarás edificando a alguien al decirlo?
N: ¿Es necesario? Si no es necesario, ¿Por qué lo tengo que decir?
S: ¿Es Sabio? ¿Le has pedido a Dios sabiduría para decirlo?
A: ¿Es amable? ¿Animará o desanimará?
No es suficiente solo tranquilizarnos cuando estamos enojados. Toma un tiempo adicional y PIENSA sobre lo que tienes que hacer o hacer después. (Rick Warren)
Comentarios
Publicar un comentario