Aunque el Coaching Ontológico es una profesión reconocida oficialmente, al ser relativamente nueva, las definiciones que se escuchan acerca de lo que hace un coach de vida no suelen del todo acertadas. En principio es bueno dejar en claro que no es un asesor, porque eso lo puede hacer solamente alguien de tiene conocimientos técnicos de una determinada área. Tampoco es un consejero. Otras disciplinas se dedican a aconsejar: consultores, docentes, pastores, expertos, entrenadores deportivos, nutricionistas, etc.
Estos servicios tienen como característica en que el mentor tiene conocimiento y experiencia, y lo ofrece a quien lo desea. Es una relación profesor-aprendiz, experto-principiante, médico-paciente.
Quien desea crecer o conocer en una determinada área de su vida, busca el consejo en quien tiene la sabiduría. El asesor trabaja desde afuera hacia adentro impartiendo conocimiento al asesorado. Este es uno de los buenos medios para crecer a nivel personal, pero no es el único.
El coaching trabaja exactamente al revés: desde adentro hacia afuera, ayudando al coachee a descubrir por sí mismo lo que está buscando. Explora y extrae los propósitos desde el corazón, sus dones, talentos, llamado, pasión y el camino a recorrer. Nada cambia si no cambia el alma.
¿Cómo lo logra? Indagando, preguntando, buscando pistas, formulando hipótesis, haciendo más preguntas, hasta encontrar un hilo conductor hasta la acción.
Ayuda a ver más lejos, porque quien no puede ver lo lejano, se vuelve esclavo de lo inmediato. Y si lo inmediato es un tipo de opresión, esclaviza primero a la mente, luego a las emociones hasta afectar al cuerpo. Las palabras crean pensamientos, y los pensamientos crean acciones. Una acción tan simple como una declaración puede ser tan poderosa que llega a crear un mundo totalmente nuevo para nuestra vida. La mente, el cuerpo y las emociones pueden ser entrenadas desde la palabra. La más maravillosa de las libertades es poder elegir las palabras que modelen mi vida. Yo elijo ser entrenado por palabras de Dios:
Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; Porque de él mana la vida (Proverbios 4:23)
Sobre el autor: Francis Lenguaza cuenta con más de 20 años de experiencia en gerenciamiento en empresas líderes en los sectores de energía, telecomunicaciones, plásticos, retail, maquinarias y network marketing. Es coach ontológico y actualmente colabora con personas y equipos en la determinación de identidad, metas, propósito, plan de vida y negocios. Comprometido con Sonia Penayo, quien es Contadora Pública Nacional, con certificación de la International Coach Federation y se desempeña como analista en el sector banca y finanzas. Ambos aman y siguen el modelo de liderazgo de Jesús y aplican herramientas de coaching en la enseñanza de la palabra. Para solicitar sesiones de coaching y conversaciones podés contactarnos en coachingyproposito@gmail.com
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