Una de las herramientas facilitadoras que provee el coaching es la resolución de conflictos interpersonales. Ya sea un conflicto en curso, para anticiparse o para resolver alguno que estaba postergado. La clave está en la gestión inteligente de las emociones, junto con el aprendizaje de conocimientos, destrezas y habilidades para poder resolver los conflictos en vez de esquivarlos o aplazar su solución.
En primer lugar conviene revisar los fundamentos de los juicios que traban la situación. La queja y el rumor es mal negocio para todos los equipos de personas. Las partes deberían enumerar los hechos, sin adjetivarlos, Luego detallar qué esperan o de qué manera cada una de las partes se sentirían conformes con el resultado.
Algunas de estas preguntas sugeridas pueden ayudar para una nueva perspectiva a la situación:
¿De qué manera este conflicto puede ser una oportunidad para resolver diferencias y mejorar mis relaciones?
¿Qué es lo que tendría que aprender para gestionar hábilmente mis relaciones personales y laborales?
¿Qué hábitos tenés que provocan conflictos o que no mejoran tus relaciones?
¿Cuál es el precio de aferrarse a ellos?
¿Qué cosas te impacientan o te cargan de ansiedad?
¿Qué nivel de protagonismo te das en la iniciativa para la resolución de conflictos?
¿De quién depende regular tus emociones y administrarlas inteligentemente?
¿Estás culpando a alguien en esta disputa? ¿Ganás algo culpando a alguien?
¿Hay alguna vieja herida que esté influyendo en esta situación?
¿Hay algo que impide dejar esa vieja herida para lograr una mejora en la relación?
¿Qué impide pedir disculpas en la disputa?
¿Por qué necesitas pedir perdón o perdonar?
Por último te invito a meditar en el significado de estas palabras:
...pero antes de ir a luchar, averigua si Dios está de acuerdo (1º de Reyes 22:5)
Las palabras crean pensamientos, y los pensamientos crean acciones. Una acción tan simple como una declaración puede ser tan poderosa que llega a crear un mundo totalmente nuevo para nuestra vida. La mente, el cuerpo y las emociones pueden ser entrenadas desde la palabra. La más maravillosa de las libertades es poder elegir las palabras que modelen mi vida. Yo elijo ser entrenado por las palabras de Dios escritas en la Biblia.
Sobre el autor: Francis Lenguaza cuenta con más de 20 años de experiencia en management en empresas líderes en los sectores de energía, telecomunicaciones, plásticos, retail, maquinarias y network marketing. Es coach ontológico y actualmente colabora con personas y equipos en la determinación de identidad, metas, propósito, plan de vida y negocios. Comprometido con Sonia Penayo, quien es Contadora Pública Nacional, con certificación de la International Coach Federation y se desempeña como analista en el sector banca y finanzas. Ambos aman y siguen el modelo de liderazgo de Jesús. Para solicitar sesiones de coaching y conversaciones podés contactarnos en coachingyproposito@gmail.com
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